La menta es
una de las plantas más conocidas y fáciles de cultivar en el hogar.
Esta planta
otorga múltiples beneficios a la hora de cuidar nuestra piel. Su aceite
esencial consta principalmente de mentol y trementina por lo que es muy útil
para utilizarla como refrescante y
antiinflamatoria.
1/2 taza
de hojas de menta
1 taza de agua (destilada, hervida o mineral sin gas)
1 taza de
alcohol de 96°
1 pote de
vidrio
Primero hay
que preparar las hojas de menta separándolas del tallo. Luego lavarlas y dejar
que escurra el agua, finalmente quebrar un poco las hojas para ayudar a que se
liberen los aceites de la planta.
Poner en el pote de vidrio las hojas de
menta con el agua y el alcohol (el líquido debe cubrir
completamente las hojas y en lo posible no hay que dejar espacio libre en el
frasco).
Dejar reposar en un lugar oscuro y fresco durante 20 a 30
días. Pasado ese tiempo, colar el contenido con una gasa doble o filtro de
café.
El
mentol que contiene la menta ayuda a reducir la secreción sebácea. Además
gracias a sus propiedades astringentes, antiinflamatorias y antisépticas ayudan
a disminuir la aparición de acné, puntos negros y otras impurezas en la piel. Por lo
tanto uno de los beneficios del extracto de menta es que ayuda a regular la producción
de grasa en la piel.
En este
caso se puede aplicar en el rostro con un algodón humedecido en el
extracto de menta.
Estas elaboraciones son
recomendadas sólo para uso externo y aunque están preparadas con productos
naturales, no significa que no estén sujetos a provocar en algunos casos
reacciones alérgicas. Es recomendable probar un poco del producto en una zona
pequeña de la piel, antes de ocupar el extracto en forma normal. Puede
ser detrás de la oreja.
Si prefieres puedes
bajar la graduación del alcohol para elaborarlos, ya que éste tiende a
resecar la piel. Para ello puedes evaporarlo después de la maceración, poniendo
la elaboración en un frasco de boca ancha, destapado y a temperatura ambiente por
24 horas.
También se puede bajar la
graduación mezclando el alcohol con agua (destilada, hervida o mineral sin
gas).
Los extractos naturales se
pueden conservar hasta por seis meses, ya que contiene alcohol en su
elaboración. Sin embargo, si notas que se modifica el color, textura o aroma
desecha el producto.
OTROS BENEFICIOS
ESTÉTICOS Y MEDICINALES DE LA MENTA
La menta es una planta herbácea que presenta un exquisito
aroma y sabor refrescante y mentolado. Crece rápidamente y puede alcanzar una altura de un metro
aproximadamente.
Es una de las plantas que más se cultiva en los hogares. Su
cultivo es bastante fácil y requiere de abundante agua. Puede cultivarse en
maceta o en tierra de jardín.
Se pueden utilizar
sus hojas frescas o secas.
Las propiedades de la
menta se pueden conseguir en uso
interno y en aplicaciones externas, dependiendo del beneficio que necesitemos
obtener.
USO INTERNO
Infusión:
1 cucharadita de hojas de menta
1 taza de agua
Colocar las hojas de menta en una taza. Poner a hervir el
agua, cuando rompa el hervor apagar el fuego y verter el agua sobre las hojas
de menta, tapar y dejar reposar por unos 3 a 5 minutos. Colar.
También se puede utilizar en jugos, batidos y como aderezo en platos dulces y salados.
USO EXTERNO
(TÓPICO)
Extracto de menta
Agua de menta
Loción de menta
Aceite o macerado de menta
Aceite esencial de menta
DOLORES MUSCULARES Y
ARTICULACIONES (Uso tópico)
Por sus efectos antiinflamatorios y analgésicos, la menta
puede ayudar a combatir los dolores musculares y de artritis.
Tiene un efecto
vasoconstrictor y vasodilatador, por lo que tiene propiedades como anestésico local.
QUEMADURAS SOLARES (Uso
tópico)
La menta contiene altas cantidades de vitamina A, C y ácido fólico que ayudan a combatir las
quemaduras solares. Además gracias al mentol que posee le otorga sensación de
frío a la piel, por lo que alivia el dolor de las quemaduras.
CELULITIS (Uso
tópico)
Activa la circulación
sanguínea, por lo que ayuda al tratamiento de la celulitis. Además el mentol
produce una sensación de frío en la piel, estimulando el sistema linfático,
ayudándolo a desintoxicar el organismo eliminando toxinas y el exceso de
grasas.
MORETONES (Uso
tópico)
La menta es muy útil para aliviar los moretones y golpes,
esto se debe principalmente a sus propiedades antiinflamatorias y analgésicas.
TRATAMIENTO PARA EL MAL ALIENTO (Uso interno como infusión)
Se puede utilizar en enjuagues bucales, ya que
la menta tiene propiedades desinfectantes y además refresca y combate el mal aliento o halitosis, ya que reduce la cantidad de bacterias en la
boca, causantes del mal olor.
DIGESTIÓN (Uso interno como infusión)
La infusión de menta es muy beneficiosa para la distención
abdominal. Por sus propiedades carminativas y su contenido en carvacrol, timol y
mentol contribuye a eliminar gases y flatulencias.
Su fuerte y penetrante aroma
permite activar las glándulas salivales, estimulando de esta forma la
producción de enzimas en el estómago. Estimula el hígado aumentando la
secreción de bilis.
Por sus propiedades
antiespasmódicas sirve para tratar cólicos abdominales, nauseas y vómitos.
HEMORROIDES (Uso tópico sin
alcohol)
Por sus propiedades astringentes, antiinflamatorias y cicatrizantes resultan muy beneficiosas en el tratamiento externo de los hemorroides.
Su aplicación tópica puede ayudar a disminuir la inflamación y evitar la picazón.
PROBLEMAS RESPIRATORIOS (Uso
interno como infusión)
El mentol y el timol presentes en la menta tienen propiedades antivirales. Además su contenido en ácido acético y ácido ascórbico le otorgan propiedades mucolíticas, disminuyendo la congestión y ayudando a disolver las mucosidades de los bronquios facilitando su expulsión.
La menta es un antiespasmódico natural por lo que le confiere propiedades antitusivas, muy beneficiosa para disminuir la tos.
También se puede usar de forma tópica aplicando
extracto de menta en el área del pecho, ya que relaja los músculos en el área
de aplicación lo que facilitará la respiración.
Contraindicaciones
Su uso prolongado y excesivo
puede ocasionar gastritis, úlcera, acidez o irritaciones estomacales.
Su uso tópico puede originar
irritaciones, pero sólo en casos muy aislados.
Este artículo es simplemente informativo, en ningún caso
pretende sustituir la asesoría de un profesional de la medicina. Es recomendable antes de utilizar menta
para tratar cualquier patología o enfermedad
consultar con un médico.